Un hombre fue condenado esta tarde a 11 años de prisión por el crimen de Romina Acuña, la joven asesinada de un balazo en 2010 durante una disputa entre dos familias en Ministro Rivadavia, en un caso por el que en 2016 ya habían sentenciado a su hermano, informaron fuentes judiciales.
Se trata de Juan Manuel Maidana, a quien el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 10 del Lomas de Zamora le fijó dicha pena y ordenó su inmediata detención por tres delitos: la “tentativa de homicidio” de Romina cometida un mes antes de su muerte, el “homicidio en riña” finalmente consumado en perjuicio de la víctima en concurso real con la “tentativa de homicidio en riña” del padre de la chica.
“Era de esperar por lo que había ocurrido en el primer juicio”, explicó esta tarde a Télam el abogado del particular damnificado, Claudio Espejón, en referencia a un debate previo en el que Silvano Maidana, hermano de Juan Manuel, fue condenado a siete años por “homicidio en riña”.
“Con esa carátula no se podía ir mucho más arriba en el monto de la pena, pero esta vez los jueces fueron más severos”, indicó el letrado, quien en su alegato había solicitado una pena de 25 años por “homicidio simple”.
Por su parte, la fiscal de juicio, Marisa Monti, había solicitado 18 años por ese mismo delito y subsidiariamente, una pena por “homicidio en riña”; mientras que la defensa requirió directamente la absolución por falta de pruebas.
Finalmente, los jueces Santiago Márquez, Lidia Moro y Nicolás Pló coincidieron con la calificación legal planteada subsidiariamente por la fiscalía.
Respecto a las posibles razones por las que la justicia, en dos ocasiones, consideró que se trató de un homicidio en riña y no simple, el letrado recordó que “no hubo un testigo ajeno a la familia Acuña que haya visto a los Maidana disparando, aunque sí los ubicaron en el lugar del hecho”.
“Faltó esa prueba directa”, considero el abogado de la madre de Romina.
Durante el debate declaró Andrés Acuña, el padre de Romina, quien señaló a los hermanos Maidana como los autores de los disparos que le ocasionaron la muerte a su hija y heridas en una pierna a él.
La investigación comenzó en abril de 2010, cuando la madre de Romina radicó una denuncia en la comisaría 2da. de Burzaco debido a unas agresiones sufridas por un pariente suyo durante una aparente pelea con integrantes de la familia Maidana, que vivían en una casa a 50 metros de la suya.