A días de que el Municipio de Lomas de Zamora gastara un millón de pesos por cuadra para instalar bicisendas en distintos barrios de Lomas, Banfield y Temperley, los vecinos de la calle Soler, en esa última localidad, solicitaros que se deje sin efecto la instalación y el municipio, en un insólito paso de comedia, los quitó.
El insólito proyecto de las bicicendas para unir los espacios verdes del municipio fue anunciado como una obra relevante para los vecinos que enseguida salieron a a manifestarse en su contra. Lo hicieron por las redes sociales en cada publicación realizada. En algunos casos, reclaman, ni siquiera fue reparada la zona de las bicisendas.
El quite de los bloques que delimitaban el espacio para la circulación de las bicicletas se produjo el mismo día que el municipio conducido interinamente por Marina Lesci tenía pensado inaugurarlos oficialmente con una bicicletada. Fue consensuado por los vecinos y el municipio tras varias reuniones.
“No es una necesidad de los vecinos: necesitamos reparación de baches no bicisendas”, dijo una vecina respecto del plan para gastar 224 millones de pesos en bicisendas -financiados por el gobierno nacional- para instalarlas en 22 cuadras en las que se impedirá estacionar automóviles en al menos 30 cuadras de las ya saturadas arterias lomenses.
“El municipio instaló bicisendas sin medir ninguna consecuencia. Soler es una calle estrecha. Era imposible tener eso acá”, dijo un vecino de una de las cuadras ubicada entre Pichincha y San Basilio.