Un joven de 23 años perdió el control de su vehículo y se incrustó bajo un puente de Claypole a la altura del Cotolengo Don Orione.
El conductor del Renault gris, que al parecer venía de bailar, salió despedido y falleció en el acto.
El hecho ocurrió a las seis de la mañana en la avenida Lacaze a la altura de la calle Jose Mazzini y el cuerpo quedó tirado durante tres horas a la espera de la intervención del fiscal.
Cerca de las nueve, sus restos fueron trasladados para realizar las pericias correspondientes.