Luego de detectar un caso positivo de coronavirus en su planta de Longchamps, La Serenísima, del Grupo Danone, reforzó “los procedimientos de bioseguridad para su planta industrial, cadena de suministro y estructura logística”, informó la empresa en un comunicado.
El contagiado es un trabajador del área de caldera. Apenas se conoció ese caso, algunos trabajadores dijeron que “no se habían tomado las medidas preventivas necesarias para con los compañeros del contagiado considerados contactos estrechos”. Enseguida, la empresa difundió un comunicado avisando que había sido activado el protocolo para aislar a los contactos estrechos del caso positivo.
Al mismo tiempo, a fines del mes pasado la comisión interna de delegados denunció que “la empresa está ocultando posibles casos de Covid-19. Por eso queremos hacer responsable a Aldo Bustos, jefe del sector de los médicos y a Maximiliano González, jefe de Recursos Humanos. Danone le da prioridad a la producción y no a la salud de los compañeros”, dijo uno de los delegados.
De ahí que la empresa anunciara la implementación de “una serie de medidas y protocolos específicos, con el objetivo de proteger a todos los colaboradores y garantizar el acceso de los productos a los consumidores”.
Se estableció una modalidad de trabajo remoto para algunos empleados, “el control diario de temperatura al ingreso de la planta, la provisión de elementos de seguridad e higiene personal, se incrementaron los ciclos de sanitización en las instalaciones y espacios comunes, se reordenaron los turnos y los horarios de refrigerios para minimizar contactos, se desarrollaron dispositivos de higiene especialmente adaptados a los camiones, y se está brindando capacitación a todos los colaboradores”, informó la compañía.
Más espacios para fleteros, nuevos cajeros automáticos para asegurar el distanciamiento social durante las rendiciones de los repartos y la sanitización de los camiones son otras de las medidas tomadas por la empresa láctea.