El precio de la canasta básica alimentaria (CBA) aumentó 53,5% durante el 2018, por lo que una pareja con dos hijos requirió de $ 10.197,53 para comprar la cantidad mínima de comida y no caer por debajo de la línea de la indigencia, informó el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).
En tanto, el precio de la canasta básica total (CBT), que además de alimentos reúne una cantidad mínima de indumentaria y servicios, aumentó durante el año pasado 52,9% por lo que ese mismo núcleo familiar requirió de $ 25.493,80 y no caer por debajo de la línea de la pobreza.
Solo en diciembre, el costo de la canasta básica alimentaria aumentó 0,7% mientras que el de la total se incrementó en 1,1%.
Con los valores de la canasta básica total el Indec elaborará la medición del Índice de la pobreza, entendida ésta como las personas cuyos ingresos no alcanzan para comprar un mínimo de indumentaria y el pago de servicios, además de alimentos.
En tanto que con los valores de la canasta básica alimentaria se confecciona el Índice de indigencia, que comprende a aquellas personas cuyos ingresos ni siquiera alcanzan para comprar la cantidad indispensable de comida para la subsistencia. Fue justamente entre julio y diciembre que la inflación se aceleró, acumulando el 27,5% y elevó los precios principalmente de la canasta básica alimentaria.
A finales de septiembre, la medición del primer semestre del 2018, arrojó un índice de pobreza del 27,3% superior al 25,7% del segundo semestre del 2017. En ese momento, y con una inflación del 6,5% mensual, el presidente Mauricio Macri aseguró que el aumento de la pobreza “es un número que esperábamos, que refleja las turbulencias de los últimos meses y las dificultades que estamos atravesando”.