Una fiscal de Lomas de Zamora solicitó la elevación a juicio oral de la causa por el femicidio de la adolescente Anahí Benítez, hallada violada, asesinada y enterrada en agosto de 2017 en la reserva natural Santa Catalina, informaron fuentes judiciales.
Por el asesinato de Anahí (16) se encontraban detenidos con prisión preventiva Marcos Esteban Bazán (35) y Marcelo Sergio Villalba (40).
El pedido fue formulado por Fabiola Juanatey, de la Fiscalía Especializada en Violencia de Género, al juez de Garantías 4, Sebastián Monelos, quien ahora deberá resolver si hace lugar al planteo. La funcionaria judicial solicitó que Bazán sea juzgado por los delitos de “privación ilegal de la libertad agravada, homicidio agravado por alevosía, criminis causa y por mediar violencia de género”, en calidad de coautor, y como partícipe necesario de “abuso sexual agravado por acceso carnal” en concurso real entre sí.
Asimismo, pidió como imputación alternativa que Bazán sea enjuiciado por “encubrimiento agravado”, informaron fuentes judiciales a Télam. En tanto, solicitó que Villalba sea sometido a juicio por “robo, abuso sexual agravado por acceso carnal” en carácter de autor, “privación ilegal de la libertad agravada y homicidio agravado por alevosía, criminis causa y por mediar violencia de género” en calidad de coautor, en concurso real entre sí.
El hecho
El 29 de julio del 2017, Anahí salió de su casa de Parque Barón, en Lomas de Zamora, a caminar unas cuadras hacia el Parque Municipal Eva Perón (el “Parque de Lomas”) y, al no regresar, su familia denunció su desaparición y comenzó su búsqueda.
El 4 de agosto su cadáver fue encontrado desnudo, con lesiones cortantes y contusas en el rostro y la cabeza, enterrado en la Reserva Natural Santa Catalina, y la autopsia determinó que había muerto por asfixia por sofocamiento.
Dos días después, Bazán fue detenido luego de que perros rastreadores marcaron su casa, ubicada a 300 metros del lugar del hallazgo del cuerpo y donde se encontró una olla con arroz similar al encontrado en el estómago de la víctima, ropa de mujer, pelos y manchas de aparente sangre.
En tanto, Villalba fue detenido el 16 de agosto de 2017, luego de que los investigadores determinaron que había tenido en su poder el celular Samsung Core de la adolescente asesinada. En su descargo ante la fiscal Verónica Pérez, el sujeto contó que en una fecha que no recordaba, él se había encontrado el teléfono “tirado en una vereda con pasto” cuando regresaba a su casa de Llavallol.