Con las estaciones de trenes vacías, las calles sin colectivos, las escuelas sin actividad, los bancos cerrados, las estaciones de servicio sin despacho, paralizada la recolección de residuos y muchos comercios con las persianas bajas, el paro general se hace sentir fuerte y desde temprano en Almirante Brown.
En Longchamps, al aspecto desértico de la estación de trenes, las dársenas vacías de los colectivos y de gran parte de los comercios con sus persianas bajas daba un aspecto de día domingo. Algunos locales decidieron abrir “porque la estamos pasando mal con la caída de las ventas”, le dijeron a Brown On Line.
En Adrogué, los bancos cerrados y las escuelas sin actividad daban la impresión de un feriado. La estación de servicios YPF de San Martín y Espora cerró sus surtidores al público y los locales que funcionaban lo hacían por impulso de sus dueños, salvo algunas excepciones. En la calle se nota el paro: circulan pocos autos, hay agencias de remises cerradas y pocas personas circulando.
En Longchamps, la Corriente Clasista y Combativa salió a la calle para cortan el tránsito en la entrada al barrio Rayo de Sol, en avenida Yrigoyen y Dihel. Reclaman políticas para los más necesitados, golpeados por el tarifazo y la devaluación.
En San José, con la calle Salta con muy pocos vehículos, la actividad comercial se reparte con locales mayoritariamente abiertos y algunos con persianas bajas. Sin camiones de reparto en la zona, el panorama parece el de un día domingo. “¿Sabés por qué hay que parar? Porque este gobierno nos está matando con la inflación y los tarifazos”, le decía un vecino a un comerciante de la calle Salta al 600, que decidió trabajar.
En Burzaco, los principales locales comerciales permanecen cerrados, la avenida Hipólito Yrigoyen mostraba un aspecto desolador, aunque algunos locales abrieron sus puertas, pero las paradas de colectivos vacías y la dársena de la estación sin movimiento alguno, mostraban que el paro también pegó fuerte en esta localidad de Almirante Brown.