El Ministerio de Salud de la Nación alertó a la población ante una posible vuelta al país del sarampión, un virus que había sido erradicado de América Latina hace unos tres años, pero rebrotó en los últimos meses en varios países de la región, principalmente Venezuela y Brasil.
En el país no se detectan casos autóctonos de este tipo desde el 2000, por lo que las autoridades de la cartera sanitaria insistieron en la importancia de que las personas se vacunen contra la Enfermedad Febril Exantemática, además de reportar ante la existencia de casos sospechosos. El grupo de edad más afectado son los menores de 5 años, seguido por el de 6 a 15 años, advierte el documento.
Desde Salud precisaron que “la Región de las Américas fue la primera del mundo en ser declarada libre de los virus de la rubéola en 2015 y del sarampión en 2016, por un Comité Internacional de Expertos (CIE)”.
Sin embargo, ya durante el año pasado Argentina y otros tres países -Canadá, Estados Unidos y Venezuela- habían reportado casos. La tendencia para este año empeoró, ya que en menos de tres meses ya hubo episodios confirmados en: Venezuela (159), Brasil (14), Estados Unidos (13 importados y relacionados a la importación), Canadá (4 importados), México (4), Perú (2 en residentes que no salieron del país), Antigua y Barbuda (1 importado), Colombia (1 importado) y Guatemala (1 importado).
Para evitar la reintroducción del virus del sarampión en el país, el Ministerio de Salud recomendó “verificar esquema de vacunación completo para la edad”.
Y puntualizó: “De 12 meses a 4 años deben acreditar una dosis de vacuna triple viral (sarampión – rubéola – paperas); mayores de 5 dos dosis de vacuna con doble o triple viral después del primer año de vida”.
Por otra parte, destacaron la importancia de “intensificar la vigilancia epidemiológica de casos sospechosos”, que presenten como características la aparición de n fiebre y erupciones, además de la importancia de indagar siempre sobre los antecedentes de viaje.
El sarampión es una enfermedad viral aguda, potencialmente grave y altamente contagiosa. Las manifestaciones clínicas son fiebre, conjuntivitis, tos, enantema típico (manchas características) pero que no está presente en todos los casos y erupción generalizada centrífuga con espacios de piel sana que comienza en la cara y luego desciende por el tronco y miembros.
La forma de transmisión es de persona a persona, por diseminación de gotitas a través del aire, lo que la convierte en altamente contagiosa. La presencia de aerosoles permite la transmisión aérea en lugares cerrados (como consultorios o internaciones) hasta dos horas después. Por eso es importante el aislamiento de los pacientes.