El Municipio de Almirante Brown realizó durante noviembre y diciembre exitosos operativos de prevención y control de un total de 28 fiestas de egresados para resguardar la integridad de los menores que concurren a este tipo de eventos.
La iniciativa se desarrolló en el marco de una ordenanza innovadora que integró a todos los colegios cuyos alumnos querían festejar el fin del secundario.
Los comercios habilitados para tal fin tuvieron prohibida la venta de alcohol y se realizaron testeos de alcohol en sangre en los ingresos. Asimismo, los locales tuvieron que contar con todas las medidas de seguridad necesarias y había padres designados para supervisar cada evento.
“Estamos muy contentos con los resultados. Los padres se mostraron muy satisfechos con los operativos pues sabían que sus hijos no estarían expuestos a excesos, alcohol ni drogas; que entrarían y saldrían de la fiesta sin ningún problema y con estricto control esa noche en el lugar de personal de inspección de Tránsito e inspección General”, señaló Juan Schuster, director general de Inspección de Almirante Brown.
“No se produjeron accidentes, se pudieron desarrollar las fiestas en óptimas condiciones y aquellos jóvenes que llegaron alcoholizados –producto del consumo de alcohol en las previas- fueron atendidos en carpas dispuestas afuera de los locales por personal de Salud y Defensa Civil, retirados a hospitales o llevados a sus hogares por sus padres”, finalizó el funcionario.
En total, fueron 43 los cursos que desarrollaron sus fiestas de egresados, pertenecientes a 29 escuelas del distrito, tras previas charlas de agentes de Inspección General en las instituciones educativas y los boliches.