La 24a. Campaña Nacional de Prevención del Cáncer de Piel se realizará entre hoy y el viernes con atención gratuita en hospitales y centros adheridos de varias ciudades del país, bajo el lema “El sol sin protección daña”, organiza la Sociedad Argentina de Dermatología (SAD).
Para saber los lugares más cercanos o consultar sobre las charlas y centros de atención, llamar al 0800-999-0723 o en los sitios www.cancerdepiel.org.ar y www.facebook.com/PrevencionCancerdePiel. Hay 25 centros de atención en CABA que lo realizan, uno en Adrogué (San Benito 14, con turno al 4294.4711) y uno en Lomas de Zamora (hospital Luisa C. de Gandulfo, Balcarce 351, de 9.30 a 11.30); en los hospitales Iriarte de Quilmes y “Mi Pueblo” de Florencio Varela.
“El cáncer de piel es la forma más común de esa enfermedad en los seres humanos, y detectado a tiempo es curable en la mayoría de los casos”, recordaron desde la SAD.
Enfatizaron además que “en los últimos 30 años hubo más gente con algún tipo de cáncer de piel que con cualquier otro tipo de cáncer”. El 90 por ciento de los cánceres sin melanoma están asociados con la exposición a los rayos ultravioletas (UV), que se dividen en tres categorías básicas: UVA, UVB y UVC.
“Los UVC, los más nocivos, son absorbidos por la capa de ozono. Los rayos UVB, aunque son filtrados en alta proporción por la capa de ozono, son los responsables del enrojecimiento y las quemaduras solares y los protagonistas en la generación del cáncer de piel, además de ser coprotagonistas en el bronceado y en la conversión de la vitamina D a su forma activa”, explicó la SAD.
Asimismo, los rayos UVA “llegan en mayor cantidad a la superficie terrestre, tienen menor energía que los UVB pero penetran en la piel en profundidad, dañando el tejido elástico. Son también coprotagonistas del cáncer de piel y los que generan el bronceado”, agregaron. “El efecto de las radiaciones UV en la piel es acumulativo, progresivo e irreversible”.
Esos efectos pueden aparecer poco después de la exposición solar o años más tarde: “Entre los primeros se destacan el eritema, la quemadura solar y las pecas, las fotodermatosis y la inmunosupresión, mientras que entre los segundos están la fotocarcinogénesis y el fotoenvejecimiento”, advirtieron.