Aunque el fin de semana ganó y cortó la racha, los 12 partidos sin triunfos le terminaron costando muy caro a Brown de Adrogué, que terminó fuera de la zona del Reducido por el segundo ascenso a Primera y con el dolor de ya no ser. Este sueño de un campeonato que se terminó convirtiendo en pesadilla termina mañana en el Lorenzo Arandilla de Adrogué, cuando el local enfrente a Almirante Brown a las 15 con la transmisión de TyC Play, con el arbitraje de
Gastón Suárez.
La última victoria de los de Adrogué había sido el 9 de julio ante Brown de Madryn. Casi tres meses demoró en sumar de a tres el equipo de Pablo Vico. Pero ya era tarde para todo.
El partido se jugará en medio de serios cuestionamientos por parte de un grupo de socios hacia el presidente de la institución, Adrián Vairo, y la comisión directiva del Tricolor, tras la negativa a realizar una asamblea para explicarle a los socios adónde irán a parar los más de 124 millones de pesos que el club recaudó en el partido ante Belgrano de Córdoba en San Nicolás.
Será para el Tricolor el final de un año donde el equipo terminó arrastrado por un enrarecido clima institucional. Durante 2022 los socios agrupados en “Socios x Brown” levantaron la bandera de un plan maestro para reformar el estadio Arandilla, presentando un proyecto para realizar una asamblea de acuerdo al estatuto del club para dotarlo de iluminación, como primera medida. La comisión rechazó de plano el pedido y echó del club a los socios.
De este modo, a Brown de Adrogué no le queda más que pensar en 2023, rearmarse desde lo institucional y proyectarse como un club con verdaderas pretensiones de lograr el ascenso a primera.