Darío González, uno de los pioneros de la movida tropical de los años 90, líder del Grupo Angora, solista durante un tiempo y luego otra vez integrante de esa formación, falleció el sábado víctima de Covid-19. Estaba internado en el hospital de alta complejidad “El Cruce-Néstor Kirchner”, de Florencio Varela.
Vecino del barrio Santa Clara de Claypole, Darío fue despedido en las redes sociales por símbolos actuales de ese género musical como El Polaco y Pablo Lezcano, que lamentaron su partida física. La familia del músico, sus hijos y su compañera, están aislados en su casa de Claypole.
“Gran músico browniano y referente de la movida tropical, fue el primer músico en incorporar trompetas y clarinetes a la cumbia en los años 90. Darío González también fue militante y siempre colaboró con la gente de Brown”, resaltó el Instituto de Culturas de Almirante Brown al anunciar el fallecimiento de González.
Apodado “El inimitable”, Darío tenía a veces una particular manera de plantarse sobre el escenario, casi quieto, como desafiando desde esa inmovilidad a quienes bailaban con su música, con letras donde se declaraba roto de amor, como el clásico “Enamorado estoy”.
A mediados de los años 90 empezó a perfilar su carrera solista y recién hace unos años volvió a la formación del Grupo Angora para realizar presentaciones conjuntas y grabar un disco llamado “Música colombiana”.
En 2019 había sufrido un ACV que le dejó cierta parálisis en el rostro y le costó demasiado volver a los escenarios, pero lo logró. “No tengo enemigos”, dijo en un video que publicó en sus redes sociales en julio de 2020, dedicado a sus seguidores por el Día del Amigo.
“¡Darío! QEPD. Mis condolencias a toda su familia. Otro grande de nuestra música que vamos a recordar por siempre”, escribió El Polaco en sus redes sociales.
Durante la década de 1990, en la que surgieron Ricky Maravilla, Lía Crucet, Miguel “Conejito” Alejandro, Sebastián, Gladys “La Bomba Tucumana”, Malagata y Alcides, entre otros, Darío y el Grupo Angora representaban una referencia musical ineludible.