El presidente Alberto Fernández reclamó una nueva reforma judicial en el acto de inauguración en Avellaneda las obras de ampliación del edificio donde funciona el Departamento Judicial Avellaneda/Lanús, que permitirá facilitar el acceso a la justicia de los vecinos de la zona.
El acto tuvo lugar en el edificio municipal “Beatriz Mendoza”, ubicado en Carlos Pellegrini 350, de la localidad de Piñeyro, sobre la ribera del Riachuelo. El edificio lleva el nombre de la vecina de Avellaneda que inició hace años una de las causas judiciales que derivaron en la creación de la Autoridad de Cuenca Matanza Riachuelo (Acumar), durante la presidencia de Néstor Kirchner, y la consiguiente decisión de comenzar con las políticas concretas de intervención en el saneamiento de la ribera.
Durante su discurso, el presidente reclamó a la Cámara de Diputados que sancione el proyecto de ley de reforma judicial que envió al Congreso, y advirtió que “es necesario que la Justicia funcione, que tengamos jueces técnicamente preparados, moralmente probos y una justicia rápida”.
“Sigo esperando que la Cámara de Diputados se digne a tratar la propuesta para reformar la justicia federal, para que tengamos herramientas para juzgar al crimen organizado. Eso busca el proyecto, no queremos poner jueces amigos subrogantes en juzgadnos que me conviene, queremos jueces preparados, que ingresen por concurso para que la ciudadanía tenga la justicia que se merece”, señaló.
“Cuanto más presencia policial hay en las calles, más se previene el delito y menos seguros se sienten los que delinquen porque saben que la posibilidad de apresarlos son más cercanas”, aseguró luego y subrayó que “el problema de la inseguridad no lo padecen los ricos”, lo padecen las clases populares. “A ellos debemos darle una respuesta”, sostuvo.
Asimismo, el presidente se refirió al anuncio acerca de que la Argentina estaría en condiciones de recibir entre diciembre y enero 10 millones de vacunas Sputnik V desarrolladas por Rusia contra el nuevo coronavirus.
“Nosotros no le preguntamos a nadie que ideología tiene la vacuna, sino que le preguntamos si salva vidas de los argentinos. No me importa quien la produce. Hay que salvar la vida de los argentinos”, dijo Fernández que estuvo acompañado por el gobernador bonaerense Axel Kicillof y el intendente local Jorge Ferraresi.
También se refirió a la pospandemia, al aseverar que la “normalidad” que conocía antes del coronavirus “no” le gustaba, y afirmó que, luego de que llegue la vacuna y se supere esta situación, habrá “otra normalidad, que nos incluya a todos, una normalidad donde el Estado de derecho se respete”, subrayó el mandatario.
El nuevo polo judicial
El nuevo polo judicial está ubicado en una construcción, que se encuentra ubicada sobre la ribera del Riachuelo, a metros del puente Bosch, fue a fines del siglo XIX la sede de una fábrica de vidrio denominada Cristalería Papini, fundada por Rafael Papini, un italiano extrabajador de Rigolleau.
Durante décadas fue una gran planta productora de elementos de vidrio para el mercado de entonces, pero, tras su paralización, permaneció abandonada durante décadas hasta que en 2012, con el saneamiento del Riachuelo, fue recuperada por el Estado y puesta bajo la administración del municipio de Avellaneda.
La propuesta de refuncionalizar este histórico edificio responde a los requerimientos de espacios necesarios para que allí puedan funcionar también el resto de las dependencias del poder judicial, para facilitar de este modo a los vecinos un mejor acceso a la Justicia, mediante un proceso de descentralización y acercamiento, señalaron las fuentes.
El proyecto de obras se desarrolló en dos sectores del edificio, en donde se concretó una sala para central hidráulica y ascensores, remodelación de los sectores para diferentes tribunales correccionales y de ejecución, y sala de juicio oral; restauración de la fachada y entrepisos; refección de los lugares donde funcionarán juzgados en lo criminal, y otros trabajos.
El denominado Polo Judicial de Avellaneda comprende además otro edificio, ubicado en Avenida Mitre 2.600, en el cual se ampliaron las instalaciones y se pusieron en valor el segundo y tercer piso, se mejoró el sistema de ascensores, se unirán los dos cuerpos de la construcción y se ampliaron todos sus espacios para conseguir una óptima funcionalidad de los diferentes tribunales y fiscalías a radicarse allí.
Esta obra había sido paralizada en 2016 por la gestión anterior y ahora fue reactivada con el objetivo de prestar un mejor servicio de justicia, destacaron las fuentes.