El padre de dos niños abusados denuncia que un juez de Familia del Departamento Judicial de Quilmes exigió que sus hijos menores de edad abusados por su tío y por su propia madre vuelven al hogar donde viven ambos abusadores, en un fallo tildado de “delirante” por el abogado del padre de los niños, que vive con sus hijos en San José.
Se trata de Pablo Ferrari, titular del Juzgado de Familia 2 de Quilmes, quien ordenó el 28 de julio notificó al padre que debe restituir los hijos con su madre, en el mismo lugar en que habían sido abusados sexualmente por su tío y habían recibido maltratos por parte de la propia madre.
“Es una situación desesperante. Está poniendo es riesgo la vida de los chicos. Es una locura y lo vamos a denunciar en el Consejo de la Magistratura por mal desempeño en sus funciones. Además, ya apelamos esa resolución, pero tenemos que obedecer la orden judicial. Lo que sí podemos decir es que se está violando el interés superior de los niños. Es un fallo espantoso, no se ajusta a derecho. Me animo a decir que el juez nunca tuvo este expediente en sus manos”, explica a Brown On Line el abogado del padre de los niños, Carlos Dieguez.
“El padre no tiene problema en que siga vigente el régimen de visita, pero los chicos no quieren ir con la madre. La ven y lloran. No quieren ir a vivir con ella en el hogar en el cual fueron abusados por su tío”, narró el letrado, quien además cuestionó el procedimiento del juzgado. “Le mandaron una carta documento intimidatoria en su domicilio sin previamente haber notificado al letrado patrocinante”, dice Dieguez, quien representa de forma desinteresada al hombre.
Un dato importante: el juez de Quilmes toma la decisión sin que esté resuelta la cuestión de fondo, pues el padre de los niños tramita la tenencia de sus hijos y denuncia los maltratos de la madre, además del reintegro. “El juez sabe que eso se está tramitando en Tribunales de Lomas y resuelve que los chicos vuelvan al lugar al que fueron abusados. Es insólito y descabellado”, dice el letrado. “Es una bomba que no se sabe en qué momento explota.”
“No tiene lógica jurídica para una persona que esté en sus cabales. He visto fallos insólitos en mi trabajo como abogado, pero esto me superó”, contó el letrado.
La madre biológica de los niños tenía una restricción de acercamiento hacia sus hijos, por eso “intentó llevárselos por la fuerza cuando salían” de la escuela cuenta el padre de los niños, quien logró evitarlo.
“El tío nos besa la cola”
Brown On Line habló con el padre de los niños, accedió a testimonios de los menores, en los cuales ambos manifiestan. “No queremos volver con mamá Rocío. Queremos quedarnos acá con mi papá”.
“El tío nos besa la cola y la pipí”, dicen los niños cada vez que se les pregunta sobre los abusos sufridos por su tío, llamado Santiago, hoy de 18 años de edad. “No queremos volver con Rocío porque ella me pega, me arranca los pelos, me trata mal, me agarra de las orejas, no me deja ver televisión”, dice uno de los niños.
“Estamos desesperados porque tenemos miles de pruebas de los abusos sufridos por mis hijos. Mis hijos no tenían DNI, ni vacunas y estaban mal alimentados cuando vivían con la madre. Hicimos todas las denuncias correspondientes”, cuenta Juan, el padre de los niños, quien junto con su mujer tenía un merendero en su casa y debió cerrarlo ante las amenazas de su ex mujer y su familia.
“El juez Ferrari se agarra de que la denuncia penal por abuso sexual fue archivada”, dice el letrado. Es que el año pasado, el padre de los niños, hoy de 6 y 8 años, denunció ante la justicia penal de Quilmes que el tío de los niños, por entonces de 17 años de edad, abusó sexualmente de sus sobrinos cuando tenían 5 y 7 años.
Intervino en esa denuncia de abusos sexuales la Fiscalía del Fuero Penal Juvenil Nro. 2 de Quilmes, a cargo del doctor Bruno. Entre ellos y la comisaría, en dos meses, no pudieron notificar al abusador en dos meses y la causa, la IPP 13-00-019180/19, quedó archivada.