Dos niños de 5 y 7 años murieron asfixiados al incendiarse la vivienda en la que vivían en Florencio Varela, y por el hecho fue acusado su abuelo, que habría prendido fuego la casa para vengarse por los malos tratos a recibidos por parte de su hija y su yerno.
Todo comenzó esta mañana cuando el hombre, identificado como Miguel Ángel Zabala (78), se encontraba en la finca de su hija, ubicada en la calle Río Carcarañá al 2200, en el barrio Don Orione, junto a sus dos nietos, Joel y Aarón Barraza.
Los dos niños murieron asfixiados a los pocos minutos de haberse iniciado el fuego, en tanto que Zabala sufrió quemaduras leves y fue trasladado al hospital Mi Pueblo de Florencio Varela, donde esta tarde permanecía internado en observación pero fuera de peligro.
Según informó un vocero a judicial a Télam, el anciano inició un incendio al prender fuego una colcha en presencia de los niños, por una supuesta venganza en contra de su hija y de su yerno. El hombre se encontraba en pésimo estado de salud física y psíquica, y habría estado un tiempo viviendo en situación de calle, hasta que su hija lo llevó a vivir a su casa unas semanas atrás, añadieron las fuentes.
Durante este período, el anciano habría sufrido maltratos por parte de su hija y del marido de ella y esta mañana había mantenido una fuerte discusión con ambos, por lo que aguardó a que se retiraran y comenzó a incendiar la vivienda cuando se quedó sólo con sus nietos.
Las fuentes señalaron a Télam que el anciano cuenta con defensores oficiales que solicitarán su inimputabilidad por el estado mental y, en caso de no prosperar, la prisión domiciliaria.