Ocho personas fueron detenidas, entre ellas cuatro colombianos y un policía federal, acusados de integrar una organización delictiva que realizaba robos a viviendas en el ámbito de la Ciudad de Buenos Aires, a las que accedían con llaves que los dueños dejaban adentro de autos estacionados que eran abiertos con inhibidores de alarmas, informaron hoy fuentes policiales.
Las detenciones se llevaron a cabo ayer, martes, luego de nueve allanamientos realizados en distintos barrios porteños y en las localidades bonaerenses de Wilde, Ezpeleta, Bernal y Temperley, ubicadas al sur del conurbano.
Según precisaron las fuentes a Télam, la investigación comenzó en septiembre del 2021 tras varias denuncias que indicaban que se habían cometido varios robos en distintos puntos de la Ciudad de Buenos Aires bajo una misma modalidad de entraderas.
Los investigadores establecieron en todos los hechos estuvieron vinculados un Peugeot 308 y un Ford Fiesta, por lo que el juez Martín Yadarola, a cargo del Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional 4, comenzó a investigar a la presunta organización.
Efectivos del Departamento Inteligencia contra el Crimen Organizado de la Policía Federal (PFA) estableció los distintos roles de cada integrante de la banda, que contaba además con otros dos vehículos para darse a la fuga tras los robos.
También se determinó que los delincuentes utilizaban inhibidores de alarmas para así ingresar a los vehículos y poder sustraer las llaves de las viviendas e información de sus habitantes.
La organización estaba integrada por cuatro hombres argentinos, uno de ellos escribiente de la PFA; uno colombiano y tres mujeres de la misma nacionalidad.
Los investigadores indicaron que uno de los acusados era quien estaba a cargo de la logística de la banda, gestionando diferentes trámites de automotor para conseguir distintos vehículos a utilizar en los ilícitos.
En tanto, las fuentes señalaron a Télam que una de las células delictivas colombianas tenía vínculos con encargados de edificios dónde se concretaron algunos robos.
Con la información recolectada, el juez Yadarola ordenó nueve allanamientos en dónde se detuvo a ocho personas y se secuestraron armas de fuego, varios vehículos, dinero en efectivo en moneda nacional y extranjera, y otros elementos de interés para la causa.
