Una mujer de 33 años y embarazada de seis meses fue baleada hoy en la puerta de su casa de la localidad bonaerense de Remedios de Escalada, y el caso se investiga como una presunta tentativa de femicidio y se cree que la ex pareja de la víctima planeó el ataque y contrató a su sobrino para llevarlo a cabo, informaron fuentes policiales y judiciales. Horas después del ataque la mujer perdió el embarazo.
La víctima fue identificada por la policía como Antonella María Piñones (33) y el hecho ocurrió alrededor de las 11.30 en la puerta de un domicilio de la calle Alzaga 3100, a 300 metros del Cementerio, en Monte Chingolo, Lanús.
A raíz de un llamado al 911, al lugar arribó personal de la comisaría 8va. de Villa Obrera, quien se encontró con Piñones con una herida de arma de fuego en la zona abdominal y otra en una pierna.
Momentos después, la mujer embarazada fue trasladada de urgencia por una ambulancia del SAME al Hospital Evita de Lanús, en el cual permanecía esta tarde internada en estado de gravedad.
Fuentes de la investigación aseguraron que la víctima había perdido el embarazo de seis meses de gestación como consecuencia de las heridas que recibió por uno de los balazos a la altura de su estómago.
Según los voceros, el testimonio de una hermana de la víctima a los policías fue clave para orientar la investigación. La testigo afirmó que reconoció a uno de los tiradores como el sobrino de la ex pareja de su hermana, con quien tienen dos hijos en común, y que el ataque se dio cuando al lugar llegó una moto tipo Suzuki con dos hombres a bordo, uno de los cuales descendió y le disparó a su hermana.
“El tipo le preguntó ‘¿vos sos Piñones?’ y después empezó a disparar”, agregó la testigo, quien afirmó que “se escucharon como diez disparos, pero mi hermana recibió cinco balazos, dos en el estómago”.
Según esta testigo, el joven que le disparó a su hermana era el sobrino de la expareja, un joven que había salido de la cárcel ayer tras cumplir una condena por el delito de “homicidio”, y que lo llaman por su apodo “Leíto”.
Si bien la víctima no realizó denuncias por violencia de género, la semana pasada Piñones recibió amenazas de muerte por parte del padre de su ex pareja.A su vez, la hermana de la mujer baleada refirió que la expareja la intimidaba con mensajes, y dijo: “El chabón siempre le decía que la iba a matar”, y que “donde la veía en el coche la pasaba por encima”.
El conflicto que habría terminado con el brutal ataque comenzó tras la separación. Los detectives sospechan que ambos tenían un conflicto por dinero debido a la tenencia de una de sus hijas, de 13 años. El hombre se hizo cargo de su hija y le reclamaba a Antonella el dinero de la manutención. Los investigadores creen que el móvil del crimen es una venganza por la presunta deuda.
Un jefe policial aseguró a Télam que se está trabajando con cámaras de seguridad y con los datos aportados por testigos para localizar y detener a los sospechosos. La causa, caratulada como “femicidio en grado de tentativa”, quedó en manos de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 8, a cargo de María Soledad Garibaldi, del Departamento Judicial de Avellaneda-Lanús.