Claypole empató 0 a 0 en su cancha por la fecha 11 de la Primera C, en un partido jugado en el estadio Rodolfo Vicente Capocasa, un juego opacado por la desvergonzada actuación del árbitro Guido Mascheroni, que permitió un juego violento sin sanción, sobre todo una patada criminal de Leonel Llodrá, delantero del visitante, contra Sergio Alfonzo, que debió dejar la cancha en ambulancia.
En su cuenta oficial de Twitter, Claypole mostró cómo la ambulancia se llevaba al volante Sergio Alfonzo y le preguntó a la AFA: “¿Hasta cuando va a haber tanta impunidad para los árbitros? @tapiachiqui, ¿Hasta cuando van a seguir perjudicando a #Claypole?”, manifestó el club.
Hubo, además, un partido de fútbol que durante el primer tiempo fue más favorable al visitante, que mostró a Claypole con dificultades para arrimar peligro al arco rival durante el primer tiempo, aunque en la segunda mitad intentó por todos los medios llegar a la victoria, pero debió conformarse con otro empate, el sexto en el campeonato, donde apenas ganó un partido.
En el segundo tiempo, Roque Drago le cambió el carácter al equipo: se asociaron más en el juego, Alfonso se hizo patrón del medio, aunque los delanteros debían bajar demasiado para hacerse de la pelota. Eso lo hacía perder sorpresa, que la tuvo de a ratos con las subidas de Pezzani, con algún destello de Mellone.
Fue casi un monólogo de Claypole la segunda parte. A los 30 minutos Alfonso sacó un tiro esquinado que el arquero de la visita rechazó volando a su palo izquierdo. Enseguida, Urquiza entró al área, le hicieron foul dentro del área pero el árbitro cobró al revés: falta del defensor del Tambero.
A los 33 minutos, el delantero Leonel Llodrá -ex Brown de Adrogué- fue directamente a golpear a Sergio Alfonzo, en una infracción que el árbitro, erráticamente, juzgó apenas con la tarjeta amarilla cuando correspondía la expulsión directa. Inmediatamente, el 8 de Claypole dejó la cancha.
El resto es anecdótico: Benítez, el 9 del Tambero, recibió de Monzón, hizo un gran movimiento cerca de la medialuna del área le pegó duro y la sacó el arquero. Claypole no claudicó en su afán de ganar, pero le faltó un poco más de precisión en los últimos metros y un árbitro que proteja a quienes quieren jugar al fútbol.