La causa por el crimen de Néstor “Rulo” Romero, ocurrido hace una semana en Glew, dio un giro inesperado en las últimas horas, tras la confesión de la hija del detenido, que dijo haber disparado ella el arma mientras su papá esta durmiendo.
“Mi papá estaba durmiendo y me tiraron el portón abajo. Me apabullé y disparé. Mi papá no tuvo nada que ver, él estaba durmiendo”, escribió Micaela en su cuenta de Facebook. “Pido disculpas no fue mi intención lastimar a nadie”, escribió.
Luego de permanecer internado en grave estado, Romero falleció el lunes en el hospital Lucio Meléndez a causa de las heridas de bala recibidas en la cabeza, que la joven dice ahora haber disparado sin que su padre estuviera al tanto de la situación.
Entretanto, Manuel, el padre de Micaela, está detenido y pesa sobre él la acusación de homicidio en perjuicio de Romero, de 38 años, a quien le dispararon porque accidentalmente les derribó la reja de la casa, en una pelea que mantenía con otro sujeto.
Resta saber si la joven, hoy libre tras estar detenida unas horas, confiesa el crimen en sede judicial para que su declaración tenga una validez concreta. “No estoy fugada, estoy lejos por el momento”, escribió de forma enigmática la joven que dice estar embarazada de dos meses.