Durante el paro general del pasado lunes, el presidente Mauricio Macri critico la medida porque, aseguro, “no creo haya habido un gobierno con tanta preocupación por fortalecer los empleos que tenemos y crear nuevos”. Sin embargo, los números oficiales dicen otra cosa.
Según datos del Ministerio de Trabajo en los primeros cuatro meses del año se perdieron 94.500 empleos en blanco siendo la construcción y la industria los dos rubros más golpeados.
De acuerdo con la Encuesta de Indicadores Laborales de mayo el total de trabajadores registrados disminuyó de 12.368.600 en diciembre de 2017 a 12.274.100 en abril pasado, lo que equivale a una baja del 1,7%.
Sólo en abril la baja fue de 28.600 empleos registrados, debido a las menores contrataciones y mayor morosidad entre los trabajadores independientes, entre monotributistas y autónomos.
En tanto, según el mismo estudio, los asalariados e independientes no registrados o en negro suman unos 7.000.000 y 1,5 millones los desocupados, conformando una población activa de casi 21 millones de personas.