Pablo Daniel Guevara, el joven detenido junto a su hermano Gabriel por el crimen de su cuñada Marcela Coronel en Longchamps, fue exonerado de la Policía de la provincia de Buenos Aires a fines de 2017 en el marco de una causa por el hurto de una moto de un depósito judicial.
Fuentes de la investigación aseguraron a Télam que, al momento de ser exonerado por la Auditoría de Asuntos Internos del ministerio de Seguridad provincial, Pablo Guevara era oficial de policía.
Según los investigadores, Guevara está acusado de haberse robado una moto que había sido secuestrado en el marco de una causa judicial, y era utilizada por él como si fuera propia.
Guevara, quien en las próximas horas será indagado por el crimen de la enfermera Coronel, había ingresado a la fuerza de seguridad en 2014 y la resolución de la exoneración es de fines del 2017, aunque fue notificado oficialmente a mediados de enero del 2018, explicaron las fuentes.
El padre de los hermanos Guevara aseguró hoy a la prensa que está convencido que Pablo fue el autor del crimen de la enfermera y que su otro hijo, Gabriel, es inocente.
El hombre reveló a los periodistas que fue él quien empezó a ver “indicios” y le dio a la policía y la fiscalía los datos para que investiguen a Pablo cuando comprobaron que él tenía en su poder el celular de la enfermera. “Vimos que estaba con un celular parecido al que tenía ella y ahí fuimos a la comisaría y todo se aclaró por eso”, dijo.
Para el padre de los Guevara, “el móvil” del crimen fue que “Pablo le fue a robar al hermano Gabriel”. El hombre cree que lo que sucedió fue que Pablo vio salir de la casa a Marcela cuando ella fue a hacer las compras, decidió entrar a robar y cuando la enfermera regresó para dejar lo que había comprado, encontró a su cuñado robando y se originó la pelea que terminó en el homicidio.
Pablo y Gabriel Guevara fueron detenidos el sábado por la noche por orden de la fiscal especializada en Violencia de Género del Departamento Judicial Lomas de Zamora, Marcela Juan, quien hoy los indagará por el crimen.
La fiscal ya había imputado al marido de la víctima a partir de una serie de contradicciones en las que incurrió al brindar su primer testimonio; en tanto que las sospechas sobre su hermano surgieron por lo declarado por su padre y su hermano y por los videos de cámaras de la Municipalidad de Almirante Brown que lo grabaron caminando y cargando a su sobrina en brazos, la misma nena que apareció abandonada en Burzaco.
En poder de Pablo Guevara, la policía secuestró tres teléfonos celulares, uno de los cuales pertenecía a la enfermera asesinada y la tarjeta de ingreso al Hospital Italiano del barrio porteño de Almagro en el que la víctima trabajaba.
El femicidio de Coronel se descubrió el 28 de mayo pasado, cuando su hija fue encontrada deambulando sola por las calles de Burzaco y se convocó a la policía.
Gabriel Guevara, padre de la niña, se presentó en la comisaría y fue con la policía hasta su casa para saber qué había pasado, ya que a la mañana la niña había quedado al cuidado de su pareja, Coronel.
En la casa de la pareja, en la Roberto Arlt al 3500 de Longchamps, Guevara y la policía encontraron a Coronel asesinada en una habitación utilizada depósito.