Con el trazo artístico y sobre una pared de las calles que él mismo había trajinado, familiares, amigos, vecinos y conocidos de Gonzalo Fernández, el joven de 22 años que murió hace poco más de dos meses ahorcado en la comisaría 3ra. de San Jose, lo recordaron y pidieron el esclarecimiento de su muerte con un mural.
El mural pintado ayer -cuando se había anunciado un festival antirrepresión policial suspendido por la lluvia- contó con la compañía de la Coordinadora Contra la Represión Policial e Institucional (Correpi), una organización que acompaña a la familia de Gonzalo en su pedido de justicia y en su convencimiento de que el joven no se suicidó sino que lo mataron.
El mural fue pintado en la esquina de Belgrano y Sánchez para acompañar el reclamo de la familia, que ya marchó en dos oportunidades a la sede de la comisaría 3ra. La última marcha, organizada a dos meses de su muerte, sus amigos y su familia dijeron estar seguros de que “Gonzalo no se ahorcó, tenía dos hijas hermosas y toda la vida por delante. A Gonzalo lo mataron”.
Un ex compañero de Gonzalo en sus tiempos de jugador del Club Atlético Temperley pintó el mural: Nelson Vargas, a quien la familia de Gonzalo contactó a través de la mamá de Leonel Sotelo, un joven a quien un policía mató de un tiro en la espalda porque lo confundió con un ladrón, en un hecho ocurrido el 1 diciembre de 2016.
Foto: gentileza familia Fernández