La Justicia investiga el faltante de 130 ampollas de fentanilo y morfina del Hospital Oller de Solano en Quilmes y por los hechos la fiscalía actuante allanó en las últimas horas el domicilio de una enfermera que quedó imputada por los hechos.
Además, se detuvo a un auxiliar de farmacia que se desempeña en el centro de salud de la calle 844 y que habría facilitado la entrega de los fármacos.
Durante el fin de semana se realizó un allanamiento de urgencia en la casa donde vive la enfermera, donde se hallaron las ampollas vacías y las recetas apócrifas utilizadas para validar el retiro de las mismas del área de Salud del centro sanitario. Con estos elementos, la fiscal Ximena Santoro aprehendió a un auxiliar de farmacia que habría entregado las ampollas a la sanitarista y en consecuencia el juez de Garantías N° 1; Juan Anglese, convalidó la detención del empleado del nosocomio.
Los implicados están imputados por “entrega de estupefacientes” que rige en la ley 23.737 y que fija una pena máxima de hasta 12 años de prisión en el inciso E del artículo 5°.
En los hechos, intervino la UFI N° 7 y personal de Delitos Complejos de la Superintendencia de Narcotráficos.