Un hombre que se encontraba detenido por tenencia ilegal de arma de guerra fue imputado también por el crimen de un oficial de la Policía Bonaerense baleado en la cabeza el viernes 2 de junio último por tres delincuentes que le robaron una moto cuando llegaba a una casa de Burzaco, ya que el arma que tenía el sujeto era compatible con la que le provocó la muerte al efectivo de 22 años.
Fuentes judiciales informaron al portal diarioconurbano.com que el fiscal de la causa, Leonardo Kaszewski, había ordenado una serie de allanamientos debido a que se determinó que el crimen había sido el resultado de un enfrentamiento entre dos bandas dedicadas al robo de motos en las localidades de Burzaco, Longchamps y Don Orione.
En ese contexto, habían sido varias las personas detenidas, de las cuales casi todas acusadas por tenencia ilegal de arma de guerra. Uno de los detenidos, que cayó en una vivienda de la calle Margarita Xirgú en Claypole tenía una pistola calibre 9 milímetros.
Como resultado de esa diligencia se constató que se trata del arma usada para matar al joven policía en Burzaco. Por esto, el hombre fue imputado también por el homicidio ocurrido el 2 de junio y ya fue indagado por el fiscal Kaszewski por ese hecho.
La investigación continúa para dar con los otros participantes del homicidio del policía Horacio Ezequiel Borja López (22), pertenecía al Grupo de Prevención Motorizada (GPM) de Florencio Varela, con dos años de servicio en la fuerza que, al momento del crimen, estaba vestido con su uniforme, más su chaleco antibala colocado y tenía en su pechera el arma reglamentaria que no llegó a utilizar, informaron fuentes judiciales.
A partir de las pruebas reunidas por la DDI de Lomas y la UFI 4 se determinó la existencia de una pelea entre bandas de la zona de Burzaco que están enfrentadas y que ambas se dedican al robo de motos. Esta pelea estaría detrás del atraco y el homicidio el joven policía.