Mientras caminaba por el Polideportivo de Rafael Calzada, el espacio vecino a la estación de trenes de esa localidad, la policía logró detener al sujeto de 22 años acusado de violar a una niña de 5 años e hija de su pareja, en un hecho ocurrido días pasados en una casa de Glew.
El sujeto quedó detenido durante el fin de semana, cuando la policía lo vio deambular por el lugar, a plena luz del día, lo detuvieron y ya está a disposición de la fiscal de la UFI 16 que tiene a cargo el caso de abuso.
Una vez cometido el abuso, detectado por la madre de la niña, se dio aviso a los servicios de emergencias y la menor fue traslada al hospital, donde debió permanecer internada debido a las lesiones provocadas por el atacante.
Días después de ocurrido el hecho un grupo de vecinos quemó la casa en la que supuestamente vivía el abusador, aunque en ese momento se encontraba allí una persona con discapacidad, que no terminó herida de casualidad. En el desbande, otros vecinos aprovecharon para robar pertenencias de la propiedad.
El hecho ocurrió en una casa de la calle Intendente Lestrade, en Glew, donde la niña se fue a dormir a una casilla ubicada en la parte trasera. Hasta allí fue el imputado: entró, trabó las puertas y ventanas del lugar y la atacó.
La mamá de la víctima sospechó que algo raro ocurría, forzó la entrada e ingresó a la casilla. Halló a su hija llorando y, en medio de un ataque de ira, le recriminó al hombre, quien la agredió y huyó. La fiscal Marcela Juan dispuso la detención del acusado, quien se encuentra imputado de “abuso sexual agravado”.