La historia ubica al ejército de “Los Colorados” en las estancias y pequeños e insipientes comercios que se desarrollaban en la zona rural de Ministro Rivadavia, el pueblo más antiguo de Almirante Brown, luego de la Batalla de Caseros. La localidad que hoy celebra 150 años iba a ser la cabecera del distrito pero finalmente, y por cuestiones de cercanía a la estación del ferrocarril, no lo fue.
Rivadavia, como lo llaman desde el amor sus vecinos y vecinas, aún conserva paisajes y monumentos históricos de sus primeros años de fundación en donde funcionaba el “Camino Real hacia Chascomús”, por sobre andaban grandes carretas y el pueblo que les servía para descansar, alimentarse y continuar camino hacia otros lados de la provincia de Buenos Aires.
Tal es el recuerdo de esta etapa histórica que el “Restaurador de las Leyes”, Juan Manuel de Rosas, tiene su propio monumento en el cruce de Av. República y 25 de Mayo. El viejo bar “Lippi”, lo que en sus inicios fue un pulpería, y “El Castillo” ubicado en el límite de Claypole y Ministro Rivadavia fueron declarados Patrimonio de Protección Ambiental por el Honorable Concejo Deliberante de Almirante Brown en el año 2012.
La primera escuela de Ministro Rivadavia comenzó a funcionar en 1892 y fue la N°8, llamada “Esteban Adrogué”, quien era por entonces una de las personalidades más destacada del pueblo que se comenzaba a conformar como Almirante Brown.
Hoy, Ministro Rivadavia es un pueblo que supo combinar aquellos paisajes agrestes de arboledas y campos con el desarrollo de un centro comercial y algunos espacios abiertos de recreación como lo son el Polideportivo “Diego Armando Maradona” y la Granja Educativa.
Al interior del distrito, Rivadavia limita con Longchamps, Glew, Burzaco y San Francisco de Asís.