Un grave accidente ocurrió el pasado jueves cerca del medio día en el barrio “El Zaizal” de Monte Grande: un nene de 12 años montado a caballo atropelló a dos vecinas y una de ellas permanece en coma desde hace seis días.
El hecho quedó registrado en una cámara de seguridad, en donde se observa como en pocos minutos el caballo se sale de control y embiste a una de las dos mujeres. “No lo vi venir. Sólo escuché un grito. Cuando me di vuelta ya lo tenía encima“, declaró Margarita Ibarra, una de las víctimas que al momento del accidente iba caminando de la mano con su nieto de 5 años.
Margarita sufrió politraumatismos pero recibió el alta médica a las pocas horas del accidente. No ocurrió lo mismo con Fidela Rivas, la vecina de 53 años que se encuentra internada en el Policlínico Municipal “Sofía Terrero de Santamarina” de Monte Grande con grave estado de salud.
“Margarita volvía del jardín porque el nieto no tuvo clases. Cuando pasan las calles Los Andes y Benavidez, el nene que venía con el caballo desbocado la enviste y sigue hacia Los Andes y Constanzo, en donde estaba mi tía de espaldas”, relata Laura Rivas, sobrina de Fidela y estudiante de Trabajo Social de la Universidad de Lomas de Zamora.
“Mi tía venía del banco, de hacer unos trámites de la pensión de mi primo que es discapacitado. Cuando estaba por doblar la esquina, el caballo la choca de atrás y ella se cae boca abajo. El caballo se le cayó arriba“, detalla la familiar.
Lo más grave llegaría minutos después: “cuando ella intenta levantarse, el caballo le da una patada en la cabeza. Mi otra tía que estaba ahí para lograr sacarla de abajo del caballo, intentó reanimarla pero no logró nada”, explica Laura, que remarca la espera de 40 minutos para la llegada de una ambulancia.
“La tuvieron que entubar porque no respiraba por sus medios. A la hora y media del accidente llegó la neurocirujana y le hicieron una intervención quirúrgica. Mi tía tuvo traumatismo de cráneo y pérdida de masa encefálica. Tiene la cabeza abierta”.
Laura destaca que “la evolución fue muy crítica, no presentaba síntomas que iba a salir del coma inducido. Pero ayer fue una buena noticia saber que fue evolucionando de a poco y que movió parte de sus extremidades“.
“Vamos esperando por sus hijos”, dice la sobrina respecto a novedades en el estado de salud de su tía. Además, Laura explicó que los menores tuvieron una charla con trabajadoras sociales del Municipio para ser contenidos.