Quilmes y Lanús ofrecen en los últimos años las sorpresas electorales dentro de la tercera Sección electoral, con resultados que cambian de forma categórica entre las elecciones primarias y las generales .
Un ejemplo de esto ocurrió ayer. Lo que en las PASO de septiembre fue derrota para el oficialismo, encarnado por Mayra Mendoza, se convirtió en victoria ajustada pero victoria al fin: 40.82 a 39.57 por ciento, una diferencia de poco más de 4000 votos.
“Desde mañana vamos a trabajar incansablemente para mejorar, para escuchar a nuestra comunidad. Falta mucho todavía, pero sin duda queremos seguir trabajando y gobernando de cara a la gente, transformando cada uno de nuestros barrios”, dijo Maya Mendoza, la jefa comunal quilmeña.
Y en Lanús, donde sumando las tres propuestas que presentó en las PASO superaba a la lista oficialista de Néstor Grindetti, el actual intendente, en las elecciones del 14 de noviembre se convirtió en derrota ajustadísima: por 2119 votos.
allí, el macrismo reunido en Juntos sumó en Lanús 41.10 a 40.30 por ciento y quedó primero en la elección, una remontada que si bien estuvo lejos en los números recordó a la levantada de Grindetti en 2019, cuando perdió por paliza en las PASO de 2019 y despegándose de Macri logró ganar la elección en aquella oportunidad.
“En veda, a plena luz del día, están arrojando volantes falsos en la vía pública. En cuadrillas, organizados e impunemente. Cumpla con las responsabilidades que le competen. Garantice que el proceso electoral se desarrolle con normalidad”, criticó Julián Álvarez, candidato del Frente de Todos, a la gestión municipal, que lanzó una campaña sucia tratando de relacionar a Álvarez con el ex intendente Darío Díaz Pérez.