El costo para cubrir los productos menstruales representa hasta $ 4.300 al año y “genera mayores desigualdades que afectan especialmente a las mujeres más pobres”, según sostiene un informe elaborado por el Ministerio de Economía y la Jefatura de Gabinete.
Las cuentas anuales marcan que una mujer o persona menstruante puede gastar $ 3.228 en toallitas y hasta $ 4.327 en tampones. El gasto en toallitas equivale al 44% de una Canasta Básica Alimentaria mensual (medida a diciembre 2020: $7.340) o al 87% del monto de una Asignación Universal por Hijo, según los $ 3.717 de diciembre pasado en el informe, si bien con el aumento de marzo la AUH pasó a $ 4.170.
Estos bienes tampoco le escapan a la inflación. El año pasado se incluyeron productos como toallas y tampones en Precios Cuidados. El costo de las toallitas del programa, por unidad, es de $6,76, lo que implica un gasto anual de $1.933. Las más vendidas aumentan a $ 11,29 y marcan un consumo de $ 3.228 por año, mientras que las más caras llegan a $ 27,53 e implican $ 7.873 en el año.
“La mitad de quienes no consiguen empleo son jóvenes de hasta 29 años, y son las mujeres en esta franja etaria las que tienen mayores niveles de desempleo. Por este motivo, la pobreza está feminizada“, remarca el informe realizado en el marco del Foro de Justicia Menstrual.