Al declarado colapso de la guardia del Sanatorio Juncal y la Clínica Monte Grande, dos centros de salud muy concurridos en la región sur del conurbano bonaerense, empiezan a sumarse clínicas de Almirante Brown -y de la región en general-que trabajan al tope de su capacidad de respuesta, casi al compás de los dos hospitales del distrito, el Arturo Oñativia y el Lucio Meléndez.
“La guardia no está colapsada, pero estamos haciendo hisopados todo el tiempo. A las 9.30 ya viene la doctora y empieza, pero es la única profesional que hace hisopados y por eso le recomendamos a la gente con síntomas venir a las 8 para ir ordenando y que no esperen mucho tiempo”, le dice a Brown On Line el personal de seguridad de la Clínica IMA de Adrogué.
La Clínica Espora de Adrogué también trabaja al tope de su capacidad, respecto de sus camas de internación en salas y en la Unidad de Terapia Intensiva.Atiende una alta demanda de pacientes para hisopados, pero no tiene su guardia cerrada ni mucho menos, aunque reconocen que están “trabajado a full”. Por eso habilitaron en teléfono para consultas: 4293-7070, interno 1123.
“La guardia se encuentra abarrotada, la terapia intensiva y clínica médica llenas”, describieron los trabajadores y trabajadoras del Hospital Arturo Oñativia agrupados en CICOP, el sindicato que reúne a los profesionales de la salud. El centro de salud de Rafael Calzada agregó ocho camas en la guardia febril “sostenida por la misma cantidad de trabajadores”, consignó CICOP. Por eso, esa asociación sindical pidió que se destine “un presupuesto de emergencia y se generen nombramientos genuinos para fortalecer los equipos de salud” que están “agotados”.
Entretanto, Mónica Méndez, referente de CICOP en el Hospital Lucio Meléndez describió una situación similar en ese centro de salud de Adrogué. “Hay personas internadas en la guardia, la terapia intensiva está trabajando al 100 por 100 de internación, es mucha la cantidad de gente que se atiende y nos está faltando personal: clínicos, terapistas, enfermería, fundamentalmente, y también personal de laboratorio, para cubrir la urgencia de la pandemia”.
La referente del sindicato que nuclea a las y los profesionales de la salud, completó: “Estamos en una situación más que caótica, que no escapa a lo que está pasando en el resto de la provincia de Buenos Aires”.
Al mismo tiempo, las trabajadoras del Oñativia acompañan las medidas del gobierno nacional para restringir la circulación, pero dicen que no alcanzan. “Hacen falta medidas más contundentes para disminuir la circulación de personas y no solo los contagios, sino también la demanda que ya no puede absorber el sistema, como por ejemplo las internaciones por politraumatismos” como consecuencia de accidentes en la calle.