Claypole empezó torcido en su regreso a la Primera C y perdió en el oeste del conurbano ante Argentino de Merlo por 2 a 1. Además, para completar el día negro confirmó que Lucas Carballo estará medio año inactivo por la rotura del ligamento cruzado anterior y de menisco exterior de la rodilla derecha luego de la patada de Capaldo, defensor de Boca, en el partido por Copa Argentina y por el cual ni siquiera fue amonestado.
En la tarde de hoy, el Tambero cayó por la mínima ante La Academia, aunque mereció mejor suerte. Incluso casi lo empata en tiempo de descuento con un bombazo de Emanuel Díaz que hizo lucir al arquero del local, aunque mostró destellos del equipo que se coronó campeón de la Primera D.
Ya de entrada, el DT Roque Drago no pudo contar con Carballo ni con Juan Cruz Iglesias, también golpeado. Para colmo, a los 3 minutos el arquero del local sacó fuerte, la pelota picó 10 metros antes del área grande, la bajaron para que Arias entrara de frente y defina ante un indefenso Tiago Libares: era el 1 a 0 que ningún equipo quiere porque condiciona el juego. Lo hizo.
El juego fue enredado, sin un claro dominio. Claypole jugó adelantado en el campo, presionó la salida de Deportivo Merlo para achicar espacios y llegar rápido. Lo logró en contadas ocasiones y optó más por el juego aéreo, sobre todo por las proyecciones de Leonel Landaburu. Pero le costaba llegar con claridad al equipo de Drago.
A los 39, una genialidad de Pasquale que sacó un centro increíble con un hombre encima, posibilitó que Facundo Garzino se elevara y metiera un cabezazo milimétrico que dejó al arquero de Merlo atornillado. Era 1 a 1. Enseguida, Pasquale, vivo, quiso sorprender con un tiro desde muy lejos que casi se le mete a Oviedo.
El segundo tiempo fuer una continuidad del primero, aun que tuvo dos chances el Tambero para ponerse delante en el marcador. Hasta que a los 18 minutos, Claypole se equivocó en defensa tras un lateral y marcó a la pelota pero dejó solo a Moreno, que entró por el medio del área chica y sin marca puso el 2 a 1.
Con Javier Monzón por Landaburu y con Paz por Godoy, Drago arriesgó para intentar empatar. Pudo hacerlo a los 49 minutos, pero se quedó con las ganas de debutar sumando en su regreso a la Primera C.