Ramiro Enrique se presentó como profesional del fútbol a sus 19 años con la camiseta de Banfield. Se trata del joven hijo de Héctor “el Negro” Enrique, campeón del mundo en México 1986 con la Selección y ganador de todo con el Millo. Ambos de Burzaco, el pibe sigue los caminos de un grande que se hizo mella en el fútbol.
A los 27 minutos del segundo tiempo, Ramiro ingresó por Luciano Pons en el equipo que entrena Javier Sanguinetti y se mostró decidido y con solvencia. Otro juvenil más que el DT tiene en cuenta para su equipo, entre los que figuran Martín Payero y Agustín Urzi.
Mientras que su papá debutó con la casaca bordó de Lanús, Ramiro vistió la verde y blanca para marcar sus primeros minutos en la Primera División. El taladro enfrentó de local a Racing y lo venció por 2-0.
Categoría 2001, el ingreso de Enrique en el ataque le dio movilidad a Banfield que liquidó a la Academia con el segundo gol. Al final del partido, Ramiro le dedicó el debut a su abuelo, que falleció hace poco.
Acompañado por su familia que lo siguió por la pantalla chica, Enrique se suma al grupo del Sur que entre jóvenes y experiencia culminó la Copa Maradona en la final contra Boca Juniors. El Taladro se juega por los pibes y la respuesta es positiva: arrancó con el pie derecho.
