El 15 de diciembre de 2006, Andrés Roberto, de 53 años, asesinó a su ex pareja Mónica Ríos de al menos cinco disparos en plena vía pública en Lanús. El femicida había estado detenido en su momento por el crimen, pero los funcionarios de la Justicia le otorgaron la libertad ya que la figura del femicidio no existía en ese entonces.
El delito por el cual le fue imputado en ese entonces fue “homicidio simple”. Pero 14 años más tarde de que quede en libertad, una amiga de Mónica logró reconocer al femicida en Mar del Plata. La perspectiva de género de un fiscal fue clave para que se le cambiara la carátula por “homicidio agravado por alevosía”.
Mónica había denunciado al menos nueve veces a Andrés por violencia de género, quien tenía prohibido acercársele tras una medida perimetral dictada por la Justicia. Fue por ello que el fiscal Leonardo Kasewsky apeló al fallo de la jueza que lo dejaba en libertad.
El femicida fue detenido en Villa Albertina, Lomas de Zamora, por la Dirección Departamental de Investigaciones (DDI) local.
