El presidente Alberto Fernández, acompañado por el gobernador de Buenos Aires, Axel Kicillof, y el jefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, anunció la nueva cuarentena con una modalidad de apertura “escalonada”. “Se ha hecho mucho más lenta la ocupación de camas de terapia intensiva”, afirmó el presidente.
La nueva etapa comenzará el 18 de julio al 2 de agosto. “Vamos a ir tratando de volver a la vida habitual en este nuevo mundo que nos exige cuidados diferentes”, explicó Fernández. “Mientras tanto vamos a seguir trabajando en el fortalecimiento de nuestro sistema de salud”.
El mandatario remarcó que el virus aún “no está superado” y que “nadie es inmune”. Así mismo, afirmó que en el Área Metropolitana de Buenos Aires “el promedio de contagio es de 39 años”.
“Es muy importante que entendamos que, a pesar de todos los esfuerzos que hacemos, el riesgo de circulación existe y debemos extremar nuestros cuidados para que podamos controlar la situación“, puntualizó Fernández. Los casos de Covid-19 “en la ciudad de Buenos Aires se duplicaban cada 16 días, pero hoy duplica entre 30 y 32 días y en el gran Buenos Aires, que duplicaba cada 12 días, hoy duplica cada 21 días”, indicó.
En la provincia de Buenos Aires se abrirá la producción de más industrias y los intendentes podrán establecer más permisos de acuerdo a la situación de sus distritos. El uso del transporte público seguirá limitado a trabajadores de tareas esenciales.
Se intensificarán los operativos para la detección de casos y rastreo de personas que estuvieron en contacto con contagiados. En caso de que la curva se dispare, habrá una vuelta atrás con mayores restricciones.
En tanto, a las 18 el gobernador Kicillof dará una conferencia de prensa acompañado por el jefe de Gabinete bonaerese, Carlos Bianco, y el ministro de Salud provincial, Daniel Gollán, para comunicar detalles.
Estuvieron también presentes a través de videoconferencia los gobernadores Jorge Capitanich (Chaco), Arabela Carreras (Río Negro) y Gerardo Morales (Jujuy).