Los trabajadores de reparto de aplicaciones realizaron esta semana su tercer paro laboral para reiterar el reclamo de mejoras salariales, elementos de seguridad para continuar trabajando en este contexto sanitario y visualizar la muerte de seis trabajadores por accidentes de tránsito en lo que va del aislamiento obligatorio.
Las manifestaciones tuvieron lugar en Córdoba, Buenos Aires, La Plata y Rosario, respetando el distanciamiento social. Las redes sociales también se llenaron de mensajes bajo el hashtag #YoNoReparto.
“Las y los trabajadores de reparto somos esenciales: proveemos de sus necesidades a los abuelos, somos los que les llevamos el alimento a los demás trabajadores como las enfermeras de la primera línea, los que hacemos posible que las madres no salgan de sus casas con sus hijos a hacer las compras“, aseguró en un comunicado Damián Zárate, trabajador de Rappi.
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“Si nos contagiamos no tenemos obra social donde atendernos, ni licencia por enfermedad. Nuestra situación es de vulnerabilidad extrema: ya son seis los repartidores muertos desde el comienzo de la cuarentena -el más reciente, en Córdoba- producto de las condiciones y los ritmos de trabajo que nos imponen las empresas, ni ART tenemos“, sostuvo por su parte Laura Cáceres, de Pedidos Ya.
El último trabajador fallecido en Córdoba, a raíz de un accidente de trásito mientras trabajaba, tenía 28 años. Sus compañeros pidieron justicia a través de varios carteles en el paro de esta semana.
De esta forma, los trabajadores de reparto se sumaron al paro internacional que se realizó en distintos países del mundo como Brasil, México, Chile y Costa Rica, en demanda de “condiciones de trabajo dignas”.
