Los oficiales que tenían una orden de allanamiento de un domicilio de Temperley derribaron una reja y la puerta a golpes de la casa de Eduardo el sábado a las 7. Pero se equivocaron de vivienda.
La familia, muy asustada por los golpes contra su reja de ingreso, se comunicó inmediatamente con el 911. Al ver a la policía, se tranquilizaron un poco, pero luego se dieron cuenta de que estaban siendo allanados.
“En el video se ve a uno que sale y mira el número de la casa. Si estás allanando una casa y estás seguro de que es la correcta, ¿para qué vas a salir a ver el número? Alguna duda les surgió. No entiendo”, comentó la mujer que vive en la propiedad, en charla con Telefe Noticias.
Los policías buscaban 600.000 pesos, un taladro, una tablet y un camiseta de básquet. Luego de de violentar la entrada, los efectivos salieron de la vivienda a chequear si la dirección era la correcta y tuvieron que volver a la la casa a pedir disculpas