Una pareja de 25 años denuncia que el sábado último, cuando estaban en un boliche de Longchamps, la policía los golpeó y se los llevó detenidos a la comisaría de esa localidad, donde los siguieron lastimando y mantuvieron privados de su libertad hasta el domingo a las 17:00. Buscan testigos de hecho.
“Cerca de las 3.30 de la mañana hubo una pelea, los patovicas estaban a los empujones pero no podían sacarlos. Nosotros estábamos a un costado, cerca del conflicto. Como no podían pararlo la policía ingresa a la galería interna del boliche y agarran a mi marido y le empiezan a pegar”, relata la joven protagonista de los hechos. “Gritaba y les decía que se confundieron, que nosotros no habíamos hecho nada. Cuando veo que la policía no dejaba de pegarle a mi pareja me tiro arriba de él para que no lo lastimen más. Había un montón de gente y yo pedía ayuda pero nadie se hizo cargo.”
Según su relato, mientras los jóvenes que iniciaron los incidentes se escaparon, la policía subió al móvil y se llevó a la comisaría al matrimonio de Alejandro Korn que había ido a bailar por segunda vez a ese boliche. “Nos esposaron como si hubiéramos hecho algo y a mi marido le metieron una trompada en el ojo, que lo dejó inconsciente. Cuando llegamos a la comisaría a él se lo llevaron para el calabozo a mí me dejaron esposada esperando en el hall ”, cuenta la mujer que continúa con lesiones físicas. “Yo les preguntaba “pero qué pasó, qué hicimos nosotros”, y la única forma de responder que tenía la policía eran más golpes.”
Eran cinco los oficiales, cuatro hombres y una mujer, quienes detuvieron y golpearon a esta pareja que tiene dos hijos. “No nos hicieron el precario. Ninguno de ellos nos quiso dar su nombre.” Permanecieron detenidos hasta el domingo a las 17:00.
A los jóvenes los llevaron a los Tribunales de Lomas de Zamora y les abrieron una causa por resistencia a la autoridad y, como no tenían antecedentes, los liberaron. “En ese momento no quisimos hacer la denuncia del abuso policial porque nos amenazaron con dejarnos más días detenidos”, cuenta la mujer que luego se dirigió con su pareja al Hospital Ramón Carrillo de San Vicente, en donde certificaron las lesiones que sufrían ambos.
“Nosotros cuando salimos a bailar siempre volvemos temprano, no andamos haciendo cualquier cosa. Tenemos una familia”, expresa la mujer y agrega que “les pedía por favor que no le pegaran a mi marido, que era el padre de mis hijos.” Los detenidos se comunicaron con la Coordinadora Contra la Represión Policial e Institucional CORREPI, quienes los asesoraron y sugirieron que hagan público el hecho y que se mantengan en contacto con su círculo social.
La pareja busca testigos del hecho que hayan visto o registrado algo con sus celulares. Ya se encuentran representados por un abogado, quien está iniciando todos los procesos de denuncia por abuso de autoridad en los juzgados de Lomas de Zamora.