El Gobierno lanzó hoy el primer programa que transformará planes sociales en “planes de trabajo” para “reparar” escuelas, en un acto encabezado por el presidente Alberto Fernández, en Moreno, donde el mandatario llamó a “recomponer la solidaridad” entre argentinos y “tenderle una mano” a quien está en el “pozo de la pobreza”.
Por ahora, habrá 20 beneficiarios de planes sociales por escuela, que recibirán un aumento en el monto que perciben, a cambio de obras de reparación y restauración.
Fernández fue el orador central en un encuentro que reunió en el Club Los Indios a funcionarios y dirigentes de la economía popular y de organizaciones sociales para acompañar la presentación del plan Argentina Unida por la Educación y el Trabajo, que convertirá a 12 mil cooperativistas de la provincia y 30 mil del país en actores involucrados en la reparación de escuelas.
“Este es un enorme plan de integración”, destacó Fernández y entendió que la propuesta merece una “celebración” porque “el Estado no llama a licitación a las grandes empresas o constructoras para comprar pinturas, pinceles y rodillos, sino que llama a los trabajadores de la economía popular para que pongan en pie las escuelas bonaerenses”.
“Es un paso que tiene que ver con recomponer la solidaridad entre argentinos”, juzgó el jefe de Estado y tomó como suyas palabras de Raúl Alfonsín, quien solía decir que “la política exige la ética de la solidaridad, que no es otra cosa que ocuparse del que está en el pozo de la pobreza y tenderle una mano y sacarlo de ahí”.
En el escenario, acompañaron a Fernández los ministros de Educación, Nicolás Trotta; Interior, Eduardo “Wado” De Pedro; y Desarrollo Social, Daniel Arroyo; el jefe del bloque de diputados nacionales del Frente de Todos, Máximo Kirchner; el gobernador de Buenos Aires, Axel Kicillof; la intendenta de Moreno, Mariel Fernández; la directora de Escuelas bonaerense, Agustina Ávila; y la ministra de Desarrollo de Buenos Aires, Fernanda Raverta.
“Nunca nos olvidemos que eso viene a avergonzarnos como sociedad: que alguien se muera en el mismo lugar donde va a buscar su sustento diario y menos entendible aún que se muera el que está ahí para educar a nuestros hijos”, manifestó el presidente respecto de la muerte de Sandra y Daniel.