Un nuevo sistema que permite detectar en menos de 15 minutos los virus de influenza A y B y el sincicial respiratorio (VSR), causante de la bronquiolitis, ya está disponible en la Argentina, lo que ayuda a los médicos a diagnosticar y prescribir el tratamiento correcto.
La prueba, llamada “ID Now”, posibilita el diagnóstico a nivel molecular del ácido nucleico viral, causante primario de 80% de las bronquiolitis y 60% de las neumonías en niños de hasta dos años.
“La capacidad de obtener resultados positivos tempranos con certeza molecular en muy pocos minutos para influenza y VSR es un avance que cambia las reglas del juego“, destacó Ricardo Teijeiro, miembro de la Sociedad Argentina de Infectología (Sadi), a Télam.
El infectólogo infantil, terapista neonatal y pediatra enfatizó que el nuevo sistema “reduce el uso inapropiado de antibióticos, que ocurre cuando el tratamiento está únicamente basado en los síntomas del paciente y contribuye a la resistencia microbiana a largo plazo”.
“¿Qué hacemos todos cuando tenemos fiebre, malestar o decaimiento? Vamos a la farmacia y compramos un medicamento, pero no vamos al médico. Eso es lo peor que se puede hacer, porque no hay ninguna droga que no tenga efectos colaterales”, advirtió el médico.
Teijeiro contó que uno de los mayores problemas a la hora de diagnosticar enfermedades respiratorias, es que muchas presentan los mismos síntomas.
“Un estudio reciente demostró que de cada cinco pacientes que salen del médico con una receta de antibióticos, sólo uno lo necesita realmente, por lo que estamos haciendo las cosas mal. Este tipo de sistemas permite diagnosticar con certeza y rápido”, enfatizó.
Actualmente el test se utiliza en 12 centros de salud argentinos públicos y privados: los hospitales Naval Pedro Mallo, Garrahan, Británico y el de Niños Pedro de Elizalde, en Buenos Aires; el Laboratorio Central del hospital local y el Reina Fabiola, en Córdoba; el hospital Marcial Quiroga de San Juan, el Laboratorio de Salud Pública de Mendoza, los hospitales chaqueños Perrando y Roque Saenz Peña, el Centro de Especialidades Médicas Ambulatorias de Rosario y el hospital rionegrino Pedro Moguillansky.