La madre y el padrastro de Priscila Leguiza Lafuente fueron condenados ayer a la pena de prisión perpetua por el homicidio de la niña de 7 años, a quien mataron, prendieron fuego y arrojaron a un arroyo del partido bonaerense de Berazategui en 2014.
El Tribunal Oral Criminal (TOC) 5 de Quilmes aplicó la pena máxima a Silvana Lafuente (37) y a Pablo Verón Bisconti (35), quienes el lunes último habían sido declarados culpables del delito de “homicidio agravado por el vínculo, premeditación, ensañamiento y alevosía”.
Gabriel Leguiza, el padre de la víctima, declaró: “Siempre peleamos para que le den perpetua a estos dos chacales y tardamos cinco años y medio en llegar a esto. A mi nena nadie me la va a devolver, tengo el mejor recuerdo en mi mente y ahora puede descansar en paz”, sostuvo tras conocer la pena aplicada.
El cadáver de Priscila fue hallado el 7 de enero de 2014 entre los pastizales y arbustos del arroyo “Las Conchillas”, en el límite entre Berazategui y Hudson.
Tanto la madre como su pareja mataron a Priscila a golpes, intentaron quemar su cuerpo en una parrilla y finalmente lo colocaron en una bolsa y lo llevaron en un cochecito de bebé hasta el arroyo donde fue encontrado días después.