El 25 de octubre, Estefanía Bonome, de 9 años, apareció muerta a metros de la estación de tren de José Mármol. El asesino fue primo que confesó el crimen. Ese caso no es aislado y refleja el grado de vulnerabilidad que sufren las menores en la Argentina donde , en lo que va de 2018 fueron asesinadas 13 niñas, un promedio de un crimen cada 20 días.
Los datos son del Observatorio de Femicidios en Argentina “Adriana Marisel Zembrano” de la Asociación Civil La Casa del Encuentro.
“Es desesperante ver todos estos casos de niñas tan pequeñas. Son varones que deciden tomar sus cuerpos, satisfacerse con ellos para después asesinarlas.. Queda claro que estamos en una cultura patriarcal y sexista, no hay otra explicación”, dijo Ada Rico, al frente de La Casa del Encuentro.
Desde 2008 ya son 165 las víctimas de femicidios de hasta 12 años. Entre ellas, 33 bebas, de menos de 12 meses. En el 66% de los casos las vìctimas tenìan entre 19 y 50 años.
En 2011 y 2017 se registraron las cifras más altas de femicidios de niñas de entre 2 y 12 años, con 25 y 15 casos respectivamente. La mayoría de los asesinos tenían al momento del hecho entre 31 y 50 años.
Tal como pasó en el caso de Estefanía, en la mayoría de los casos los femicidas son parte del círculo familiar. En un 75% de los asesinatos de mujeres de todas las edades fueron por parte de padres, padrastros, hermanos, tíos o parejas.
En más del 51% de los casos las víctimas fueron asesinadas en su propio hogar y una de cada cuatro fue asesinada por armas de fuego.
La provincia con mayor tasa de femicidios en los últimos 10 años fue Santiago del Estero, le siguen Salta, Jujuy y Misiones. Entre las que menos se registraron están la Ciudad de Buenos Aires, La Rioja y San Juan.