Luego de que tomara estado público la decisión de la empresa San Vicente, controlada por DOTA, de discontinuar el servicio que corría entre Rafael Calzada y Plaza Constitución, la compañía decidió restablecerlo sin aportar a los usuarios una explicación ni de la interrupción que sufrió lunes y martes ni del restablecimiento del servicio.
Luego de dar marcha atrás con la baja definitiva del ramal a Calzada, la línea dio de baja al ramal que salía desde San Vicente y llegaba hasta Constitución. Ahora terminarpá su recorrido en la estación de Longchamps, donde los usuarios deberán tomar otro colectivo -y pagar un nuevo pasaje- para completar el recorrido hasta Constitución.
La compañía decidió en las últimas horas reducir también la frecuencia del ramal Constitución-Brandsen, que cubría el tramo de vecinos de Glew, Guernica y Alejandro Korn, y el servicio que salía desde San Vicente y llegaba a Constitución. Achicaron la cantidad de unidades destinadas a ese servicio y eso hace que muchos vecinos queden a pie, pasando largas horas en las paradas, y gastando más dinero en pasaje.
La empresa se cumbre diciendo que cubre el tramo desde Alejandro Korn hasta Brandsen con un servicio que recorre ambas cabeceras, pero los vecinos ven duplicado el tiempo de viaje y el costo del pasaje al tener que tomar un colectivo más.