Los jubilados es el sector que sufre con mayor dureza el impacto de los aumentos de los medicamentos que,entre la última semana de agosto y los primeros días de septiembre, aumentaron hasta un 18,5 por ciento.
Los datos surgen de un informe elaborado por el Centro de Economía Política Argentina (CEPA), el Centro de Estudios Políticos Para Personas Mayores (Ceppema) y la Asociación Latinoamericana de Gerontología Comunitaria (Algec) advierte que existe un “incremento sostenido de los precios de los medicamentos en general a lo largo de los últimos dos años. Esta situación se agrava y resulta aún más preocupante si se centra la mirada en aquellos medicamentos que son consumidos con frecuencia por las personas mayores”.
El promedio de aumento de los 50 remedios más consumidos por los adultos mayores en el periodo mayo de 2015 y el mes pasado fue de 157,8 por ciento. En el mismo período el aumento en la movilidad jubilatoria fue de 111,9 por ciento, lo que equivale a “una diferencia de casi 46 puntos porcentuales”.
Entre los remedios que fueron remarcados se encuentran: el Macril trepó de 251,81 a 298,33 pesos (18,5 por ciento), Dermaglos de 434,31 a 514,54 pesos (18,5 por ciento), Diovan de 741,83 a 825,21 pesos (11,2 por ciento), Travatan de 586,64 a 652,57 pesos (11,2 por ciento), Adactone A de 392,93 a 436,15 pesos (11 por ciento), Derrumal 300 de 873,59 a 960,07 pesos (9,9 por ciento), Finasterin de 592,80 a 646,15 pesos (9 por ciento), Micardis de 1123,97 a 1219,51 pesos (8,5 por ciento), Daflon 500 de 845,73 a 909,16 pesos (7,5 por ciento) y Polper B12 de 654,46 a 700,27 pesos (7 por ciento).