San Martín de Burzaco perdió ante Argentino de Quilmes por la fecha 31 de la Primera C por 3 a 1 en un juego disputado en una cancha históricamente complicada para los de Burzaco, en la cual los de Galeano no merecieron perder y menos por esa diferencia.
A los 10 minutos Sanma se durmió en la defensa, cayó un centro llovido y frontal que ganó Chávez y tiró el centro para que entrara Cristofanelli solo por el medio para someter a Carballo. En la jugada anterior, lujo de Contreras mediante, Iván Regner casi la mete con un disparo desde afuera del área.
A los 22 minutos Sanma casi lo empata en una jugada insólita: se equivocó toda la defensa del Mate, la jugaron atrás para el arquero que rechazó con el Chiqui Ledesma encima, la pelota le rebotó al delantero de Sanma hizo un efecto raro y pegó en el palo. Dos minutos después, Llodrá se la bajó a Ledesma y la bola se fue por arriba del travesaño.
A los 35 empató Sanma desde un lateral. Le cayó la pelota al ára chica y Gastón David le pegó con alma y vida para meterla en el ángulo. Golazo para ponerle justicia a ese tramo del partido porque salvo por un remate de Oberman, el local no generó peligro y Sanma fue el Sanma de partidos anteriores: genera juego y le cuesta hacer el gol.
El segundo tiempo mantuvo la tónica del primero, aunque con menos dinámica que la parte inicial. Primero lo perdió Llodrá, luego Ledesma, que lo tapó el arquero. Y como se sabe, los goles que no se hacen en el arco de enfrente se sufren en el propio.
De un tiro de esquina Argentino de Quilmes metió el segundo y dos minutos después con un pelotazo frontal, una mala salida de Carballo y un desajuste general en la defensa, el Mate se llevó un triunfo por ser más efectivo y aprovechar las oportunidades ante un Sanma que no sabe lo que es la eficacia.