La semana pasada, un sargento de la Bonaerense baleó a su novia frente a una Comisaría de la Mujer en Florencio Varela donde ella había ido a denunciarlo por violento. Este domingo, un policía local de Lomas de Zamora se pegó un tiro en una comisaría de Banfiel antes que su mujer lo denunciará por malos tratos.
Estos casos de violencia de género donde los agresores son integrantes de las fuerzas de seguridad no son aislados. Según un informe del Observatorio de Violencia de Género que depende de la Defensoría del Pueblo de la provincia de Buenos Aires más de dos mil policías que prestan funciones en diversas localidades bonaerenses tienen causas por violencia de género.
El informe basó sus números en información de las Comisarías de la Mujer y de la Familia en el territorio, así como las causas judiciales iniciadas por protección contra violencia familiar en Juzgados de Familia y causas penales remitidas por la Suprema Corte.
De acuerdo al informe, que publica el diario Infobae, de los más de 95 mil efectivos que posee la Policía Bonaerense hasta enero de 2017, “2252 agentes de la fuerza se encontraban bajo investigaciones administrativas” con 1835 sumarios que fueron iniciados entre 2015 y 2016 por causas de violencia de género.
Las cifras oficiales también revelan que en el 13% de esos hechos se utilizó el arma reglamentaria que la fuerza provee a sus efectivos. Hasta el momento de la entrega de los datos, unos 1815 sumarios seguían sin sanción. Apenas 20 si la tenían.
De una muestra de 1286 casos, el 42 por ciento de los denunciantes fueron las parejas de los efectivos quienes elevaron el reclamo, las ex parejas en un 28 por ciento, con sólo siete casos de colegas dentro de la fuerza. El principal tipo de violencia ejercido es el psicológico, que figura en un 57 por ciento, con un 38 por ciento de hechos denunciados que incluyen violencia física.
La violencia física, por su parte, es ejercida en un 95 por ciento en el ámbito familiar. Un 32 por ciento de los casos en que se reportó violencia sexual, una minoría, involucraron al lugar de trabajo de la víctima.
De ocho femicidios presuntamente cometidos por policías y registrados por Asuntos Internos en el período analizado sólo una víctima era esposa del acusado y solo una su ex pareja, una cifra que contrasta fuertemente con el resto de las estadísticas que ubican a las parejas como denunciantes.