Una banda dedicada al robo en la modalidad entraderas engañó con “el cuento del tío” a dos policías y logró ingresar a una casa, robar y salir caminando, mientras los uniformados miraban la escena desde la esquina. Por ese hecho, fueron desafectados de la fuerza.
Al ver la patrulla policial, los delincuentes les dijeron que pertenecían a la DDI de Quilmes y que iban a ingresar a una vivienda de la calle Garay al 3000, entre Gervasio Méndez y Mazzini, de Glew, para hacer un allanamiento. Los policías de la comisaría de Glew no identificaron a los sujetos y los dejaron hacer, creyendo en esa versión.
Se trata de una mujer policía que llevaba tres años de servicio en la policía y de un oficial con un año de antigüedad. A ambos se los separó de la fuerza por “incumplimiento de los deberes de funcionario público”.
Una vez que los integrantes del móvil del Comando de Patrullas creyeron la versión, los tres sujetos -que se movilizaban en un automóvil de color rojo- ingresaron al domicilio y tras intimidar a los habitantes con armas de fuego, atacaron a uno de ellos, de 32 años, provocándole un corte en la cabeza por el cual debió ser hospitalizado en la UPA de Longchamps.
Se llevaron un televisor LCD, una play station y dos teléfonos celulares y se fueron del lugar caminando.