El cadáver hallado el fin de semana en la Laguna de Chascomús, atado de pies y manos y con diversas lesiones, pertenece a un alto dirigente de UOCRA en Lomas de Zamora quien estaba prófugo acusado por el asesinato de otro integrante del gremio.
Se trata de Walter “Lobo” Leguizamón, cuyo cuerpo fue identificado a partir de las huellas digitales y debido al estado que presentaba fue sometido a un proceso de congelamiento para, mañana, realizarle la operación de autopsia. El cadáver, encontrado por un hombre que caminaba por la zona, presentaba golpes y estaba maniatado con alambre.
Leguizamón, ex secretario general de la Unión de Obreros de la Construcción de la República Argentina (UOCRA) regional Lomas de Zamora y prófugo de la justicia, había sido condenado en julio del año pasado por el asesinato de Darío Avalos, un trabajador de la construcción, ocurrido el 11 de marzo de 2014 en la ribera de Fiorito, Lomas de Zamora.
En dos juicios ocurridos en 2016 -con jurado popular- y hace tan sólo un mes, la Justicia condenó a varios miembros de la patota de la UOCRA que habían participado en los hechos que culminaron con la muerte de Ábalos y con heridos entre los manifestantes que buscaban ingresar a trabajar a un obrador en Lomas de Zamora, tarea que el sindicato consideraba privativa de sus funciones.
El juicio de 2017 dio por comprobado un plan criminal ejecutado por la patota y supervisado e ideado por Walter “El Lobo” Leguizamón, jefe local de la UOCRA -que se encontraba prófugo- y Héctor Cabrera, secretario adjunto del sindicato, condenado a cadena perpetua por su rol en el homicidio.
Tomó intervención en la cuasa la fiscal Daniela Bertoletti Tramuja, titular de la UFI 9 descentralizada de Chascomús, que depende de los tribunales de Dolores.