Un bombero de la Policía de la Ciudad, de 30 años, salvó su vida de milagro al ser baleado por un grupo de delincuentes, que lo asaltó mientras hacía una compra en un kiosco del barrio de Villa Lugano, y uno de los proyectiles se desvió en su celular.
El hecho ocurrió este domingo a las 7 cuando Juan Simón descendió de su moto para comprar un alfajor en un kiosco ubicado en la avenida Castañares al 4500.
En ese momento, fue sorprendido por tres delincuentes que quisieron robarle sus pertenencias y, al advertir que Simón tenía una credencial que lo vinculaba a la Policía comenzaron a dispararle.
Según indicaron los voceros, en total, fueron seis disparos de arma de fuego que impactaron en la mano izquierda, la clavícula y el tórax de la víctima, que debió ser trasladada de urgencia al hospital Churruca.
Al llegar al centro de salud, Simón fue intervenido quirúrgicamente por una fractura de fémur y pelvis y esta tarde se encontraba internado, pero fuera de peligro, informaron voceros policiales a Télam.
En tanto, los delincuentes escaparon del lugar y la investigación determinó que los autos en los que circulaban aparecieron incendiados.