Ayer a la noche, Marcos Jiménez, el niño de 12 años que había salido de la casa de su abuela el viernes a la tarde y nunca había llegado a la casa de su madre, adonde tenía pensado dirigirse, se reencontró con sus familiares en Glew.
“Ya está con nosotros, muchas gracias por ayudarnos a difundir su búsqueda”, escribió una de sus tías en Facebook, desde donde se movilizó una intensa campaña para dar con el chico, que pasó la noche del viernes sin que su familia supiera dónde.
Ayer por la tarde un conocido lo encontró en la zona de la estación de Burzaco y le avisó que todos estaban buscándolo. Marcos había respondido que no iba a volver a su casa. La familia supone que es porque perdió la tablet y no se animaba a volver sin ella a su casa por temor a una posible represalia.