Después del primer gol de Darío Benedetto en la victoria como visitante de Boca sobre Banfield, hubo una avalancha en la tribuna xeneize que produjo la caída de alrededor de 50 hinchas, y un saldo de diez heridos.
La Agencia de Prevención de la Violencia en el Deporte había autorizado la venta de 7.500 entradas para los simpatizantes de Boca, aunque varios hinchas denunciaron que en la cabecera visitante del Florencio Sola había más personas que las autorizadas.
Los heridos, que finalmente sólo sufrieron golpes leves, fueron trasladados inmediatamente al hospital Interzonal General de Agudos Luisa Cravenna de Gandulfo, en Lomas de Zamora.
Boca no jugaba con su público de visitante desde el 9 de junio de 2013. cuando cayó por 2-0 ante Racing Club, en Avellaneda.